Linc Monroe sabía que en la sociedad llamada La Comunidad tenían costumbres muy trasnochadas, se regían por unas estrictas normas religiosas, pero nunca se le habría ocurrido pensar que pudieran sacar a subasta a una muchacha de veintiocho años. Así que al honorable Linc no le quedó otra elección que llevarse a la atractiva Rachel Johnson y casarse con ella para poder darle la libertad. Una vez en casa, el reacio marido tuvo que enseñar a su esposa cómo defenderse en la ciudad antes de que se fuera a vivir sola. Lo malo fue que ella se adaptó a la vida en el rancho como si hubiera nacido allí. Y muy pronto, la cautivadora alumna de Linc empezó a darle unas cuantas lecciones sobre asuntos del corazón...